Un estudio reciente revela un futuro prometedor para los titulados en Formación Profesional (FP), proyectando un aumento significativo en la ocupación en diversos sectores para el año 2035. Este crecimiento se atribuye a la demanda de habilidades técnicas especializadas, la evolución de los currículos de FP y la creciente colaboración entre instituciones educativas y empresas.